Ángel Gabriel R. R.
CDMX 09/08/2021 (Noticias de México).- Este lunes 9 de agosto se conmemora el Día Internacional de los Pueblos Indígenas que, desde 1994, ha contribuido a generar una sociedad más tolerante y respetuosa en defensa de sus derechos.
El tema de este año es “los pueblos indígenas y el llamado a un nuevo contrato social”. Durante la conmemoración se pretende una serie de conferencias con asociación e inclusión de los pueblos, con el propósito de rediseñar un nuevo contrato social a favor de sus intereses y problemáticas.
Por otra parte, también se plantea atender las necesidades emergentes ante el panorama del COVID-19 ya que sus repercusiones plantean nuevos proyectos, así como revisar la Declaración del 2007.
De acuerdo con
registros de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), los pueblos indígenas en el mundo se ubican en 90 países. Se trata de unos 5 mil grupos distintos; cuya población sobrepasa el 5 por ciento de la población mundial. Equivale a 370 millones de personas de origen étnico en el planeta.
Cabe precisar que los pueblos indígenas se diferencian al resto de la sociedad por un apego profundo a su cultura, a su tierra y a sus raíces; lo que manifiesta no sólo un cambio mental y de costumbres frente al mundo globalizado; sino incluso de modelos económicos y políticos. Esa visión constituye la riqueza e identidad de todas esas culturas originarias.
En México, según datos de la Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), la ocupación indígena alcanza cerca de 64 mil 172 localidades, lo que representa el 21.5 por ciento de la población nacional; y equivale a 25.7 millones de personas aproximadamente.
Dentro de este grupo también se cuentan los 1.3 millones de afromexicanos, los cuales representa el 1.2 por ciento, ubicados principalmente en cinco estados de la República: la Costa Chica de Guerrero y Oaxaca; Michoacán, Veracruz y Coahuila.
Además, según el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) en el territorio indígena se ubica la mayor diversidad biológica, considerando que la nación posee el cuarto lugar en diversidad a nivel mundial; en su territorio también se ubican cerca del 50 por ciento de las cuencas hidrográficas del país, así como el 23.3 por ciento del agua.
No obstante, a pesar de la gran riqueza cultural que representan los grupos indígenas (incluido el afroamexicano), desde la Conquista de México por la corona española, estos estos han sido marginados a nivel social, educativo, económico.
No obstante la independencia y los cambios derivados de esta revolución, los grupos indígenas se mantuvieron marginados y lejos del desarrollo nacional. Y en nuestros días son parte de los grupos venerables, con mayor desventaja, sobre todo en el tema económico, educativo, de salud, de empleo.
Datos de INPI arrojaron que en el 2016 el 71.9 por ciento de su población se encontraba en condiciones de pobreza; y el 28.1 por ciento en pobreza extrema, lo que refleja una gran brecha de desigualdad.
En los últimos años se han realizado esfuerzos a nivel mundial para dar a los pueblos indígenas la importancia que tienen. En la Cámara de Diputados federal se trabaja en la ley de pueblos indígenas, en busca mayores oportunidades de desarrollo para la población indígena.
Ya que de acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud el 86 por ciento de los indígenas de todo el mundo – en comparación con el 66 por ciento de personas no indígenas- trabajan de manera informal y en pésimas condiciones; un 47 por ciento de todas ellas no tienen educación, en comparación al 17 por ciento de la población mundial no indígena.
Varias son las instituciones que se han dado a la tarea de mitigar dicha problemática, una de ellas es la UNESCO que en conjunto con la Asamblea General de las Naciones Unidas han impulsado, en septiembre de 2007, “La Declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas”. Dicho documento tiene el propósito de mitigar la brecha de desigualdad y discriminación indígena ante el mundo globalizado.
