CDMX, 17 de Noviembre del 2021.- Siguiendo la senda de la serpiente, caminando entre caprichosas formas geométricas, sumérgete a un círculo cósmico. El Espacio Escultórico de la UNAM es, probablemente, uno de los lugares más genuinamente sorprendentes de toda la Ciudad de México.
Pasea y observa la rotunda geometría de un círculo de 120 m de diámetro, como un cráter en medio del paisaje volcánico. Sal del perímetro y camina hasta el centro del círculo por el suelo de lava petrificada. Siente la energía del lugar. El silencio. El sol.
Sal del hipnótico círculo y adéntrate en la vegetación que lo rodea, el llamado Pedregal de San Ángel. Sigue los senderos y dirígete hacia las caprichosas y enormes formas geométricas que emergen del matorral. Colores brillantes, sólidos y puros entre la vegetación. Lava y metal. Combinación perfecta entre la ecología y el arte.
Trae calzado cómodo porque el terreno volcánico es irregular. También trae bebida y protector solar.
El Espacio Escultórico está cerrado los fines de semana.
El acceso se realiza por el Circuito Mario de la Cueva, al sur de CU.
Combina esta experiencia con la visita a Cuicuilco, el centro ceremonial ubicado en el mismo Pedregal de San Ángel, con una pirámide circular que evoca el círculo de tezontle en la representación del cosmos.
