CDMX, 1 de diciembre del 2021.- La cena es una de las tres principales comidas del día. Hay algunas personas que prefieren evitarla porque piensan que así están cuidando de su peso.
Sin embargo, esto no es recomendable. Por el contrario, son muchos los beneficios asociados a una cena completa y saludable.
Cenar ofrece saciedad y evita los momentos inoportunos de hambre durante el día. Está comprobado que permite desarrollar, tonificar y dar energía a los músculos del cuerpo durante la noche. Los prepara para la rutina del día siguiente.
De ahí la importancia de que su preparación sea la adecuada. He aquí, pues, varios consejos que conviene seguir para hacer de la cena una comida realmente provechosa para el organismo.
1. Añade un ajo
El ajo puede ser añadido a cualquier plato de comida ya sea como condimento o bien, como complemento.
Al preparar la cena, se aconseja añadir un diente de ajo después de haber agregado todos los ingredientes. Esto le dará un gusto exquisito a la comida. Además, sacarás provecho de los beneficios terapéuticos que ofrece el ajo al cuerpo humano.
2. Elige aceite de oliva en lugar de aceite vegetal
El aceite de oliva tiene múltiples propiedades que lo hacen provechoso para la salud. Ayuda a fortalecer el sistema cardiovascular y a reducir el riesgo de padecer cáncer.
Reemplazar el aceite vegetal por aceite de oliva para freír, aliñar, asar, adobar o saltear, le dará un toque más natural y nutritivo a la cena.
3. Da un toque de cebolla
Es bastante recomendable añadir cebolla a la preparación de las comidas. La cebolla contribuye a la digestión de los alimentos y ofrece una gran cantidad de nutrientes, útiles para nuestro bienestar.
Así, si se desea freír carne para la cena, primeramente se deberá sofreír en una sartén algo de cebolla picada con un poco de aceite de oliva, durante 2 minutos o 3 minutos. Luego, se agrega la carne junto con el sofrito y se cocina todo junto. Ello le dará un sabor exquisito a la comida.
4. Evita el uso de condimentos o salsas artificiales
Para la preparación de la cena, se recomienda usar especias y condimentos naturales. Trata de no utilizar en lo posible, productos artificiales como salsas o condimentos envasados y mantequillas. También es recomendable evitar el consumo de carnes o alimentos empaquetados.
Esto se debe a que no sabemos la procedencia de los mismos y suelen tener una cantidad alta de químicos. Además, suelen contener sales y grasas adulteradas, que perjudican no solo nuestra digestión, sino la salud en general.
5. Sazona con sal moderadamente
Como en cualquier otra comida del día, el consumo de sal en la cena debe hacerse de forma moderada. Las comidas muy saladas pueden traer problemas de salud.
De esta forma, una pizca de sal es más que suficiente para aderezar y preparar nuestras carnes, ensaladas y salsas. Se puede complementar con un toque de especias y condimentos naturales. Le darán un mejor sabor a la comida.
6. Acompaña tu cena con una bebida saludable
La cena debe estar acompañada con alguna bebida que proporcione energía y que ayude a regular la digestión. Pongamos un ejemplo: algún batido verde o bien algún jugo natural.
No se recomienda consumir bebidas azucaradas, artificiales o refrescos junto con la cena. Suelen provocar malestares estomacales y flatulencias. Por otro lado, el consumo sostenido de estas bebidas podría ocasionar, con el tiempo, problemas de salud.
Cena saludable, clave para una buena salud
Como se ha dicho anteriormente, la cena debe ser lo más saludable posible. Y su momento de consumo no debe ser a tan altas horas de la noche. Se recomienda cenar entre las 8:00 pm y 9:00 pm.
Esto favorece los procesos metabólicos del cuerpo. Si, por el contrario, cenar más tarde suele acarrear desórdenes en el metabolismo, problemas del sueño, obesidad, diabetes, entre otros.
En suma, cenemos y hagámoslo bien. Es decir, a la hora y con los alimentos adecuados. Tu organismo te lo agradecerá.
