CDMX, 16 de diciembre del 2021.- Un mamut, meteoritos, dinosaurios y fósiles, suelos que crujen y vitrinas de maderas nobles. Incluso si no te gustaban las ciencias en la escuela, el increíble Museo de Geología de la UNAM te fascinará. Un espacio sacado de otro tiempo, donde uno espera encontrarse caballeros con sombrero y damas encorsetadas en las luminosas salas de enormes ventanales y suelos de mosaicos estilo francés.
La entrada es impactante. Tras subir las escalinatas, el hall está presidido por una magnífica escalera art nouveau forjada en Alemania. Y, asomando por debajo, un inmenso esqueleto de mamut que ocupa gran parte de la sala principal entre columnas clásicas y un techo delicadamente decorado. En las salas, delicadas vitrinas de época muestran maravillosas colecciones de fósiles, minerales e incluso meteoritos. Y no podían faltar los dinosaurios, que encantan a grandes y pequeños por igual. Una pequeña joya para los exploradores.
El Museo de Geología está ubicado en plena alameda de Santa María la Ribera. En el centro de la alameda, otro descubrimiento inesperado: el bellísimo y elaborado kiosco morisco que México llevó a la Exposición Universal de Nueva Orleans de 1884 a 1885.
Es preferible visitar el museo y el kiosco durante el día, así lo apreciarás mucho mejor.
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