CDMX, 12 de Noviembre del 2021.- Desde hace cinco décadas, en el norte de la ciudad, está el Planetario Luis Enrique Erro, un espacio que se ha encargado de mostrarle a los capitalinos los asombrosos pormenores del universo. Sin importar las condiciones meteorológicas, en este recinto astronómico siempre se pueden ver las estrellas conocidas de nuestro hemisferio, los planetas que acompañan al sol, las galaxias, la luna y hasta los hoyos negros que recorren el cielo todas las noches.
Este gran espacio cósmico se inauguró en 1967, después del famoso lanzamiento del Sputnik en la Unión Soviética. El planetario fue una iniciativa del Politécnico Nacional y fue el primero de su tipo que se abrió en México. Desde su fundación se ha encargado, a través de exposiciones y demás eventos, de difundir el conocimiento del universo una manera ejemplar.
Es el planetario más moderno de América Latina ya que se renovó y tras una inversión de 27 millones de pesos el principal planetario de la Ciudad de México, se puso a la vanguardia para estar a la altura de los mejores del mundo.
La remodelación del Luis Enrique Erro consistió, entre otras cosas, en la adquisición de un sofisticado proyector llamado Digistar 6. Este mágico aparato tiene la posibilidad de transmitir imágenes en súper alta resolución, capaces de mostrarle a los visitantes fotografías del espacio profundamente nítidas, tan reales que las personas sentirán que están viendo en vivo como un cometa deambula por la inmensidad.
Aunado a estas importantes mejoras técnicas, se cambiaron también las butacas. Donde los espectadores pueden acostarse completamente para disfrutar la experiencia al máximo, y por qué no sentir que son parte de la tripulación de una nave y están emprendiendo una expedición afuera de la Tierra.
