Política en Movimiento
Angélica Beltrán
CDMX a 1 de abril, 2022 (Noticias de México).- La coalición PAN-PRI-PRD tiene moneda de cambio de alta denominación en medio del proceso legislativo para la Reforma Eléctrica del presidente Obrador; para cuya aprobación le hacen falta votos a Morena en ambas cámaras, por tratarse de reforma constitucional.
En este escenario y bajo el telón de los foros abiertos de discusión celebrados en San Lázaro; iniciaron negociaciones entre Morena y diputados del PRI, quienes pusieron sobre la mesa la gubernatura de Hidalgo a cambio de los votos para la Reforma Eléctrica.
El PRI de Rubén Moreira en la Cámara Baja quiere “apoyo” de Morena para la candidata de la coalición PAN-PRI-PRD al gobierno de Hidalgo, la diputada y esposa de Moreira, Carolina Viggiano; a cambio de los votos del tricolor para la reforma eléctrica. El candidato de MORENA para esa elección, el senador Julio Menchaca, podría ser el sacrificado en este intercambio de favores.
Irónicamente, la Reforma Energética del sexenio del priista Enrique Peña podría caer hoy con los votos del tricolor a favor de la contrarreforma del presidente López Obrador.
La justificación de los priistas si deciden votarla a favor, sería lo de menos; no obstante, la incongruencia en la que caerían ante la opinión pública. Pues, así como idearon florido discurso a favor de la reforma energética pasada; también lo harían ahora para la contrarreforma.
En vista de lo cual, en vez de cumplirse los deseos del líder de Morena en San Lázaro, Ignacio Mier, de sacar la reforma Eléctrica –para devolver al Estado Mexicano la rectoría de la generación de energía– el 14-15 de abril antes del fin del periodo ordinario el día 30; se podría retrasar el proceso legislativa hasta luego de las elecciones del próximo 5 de junio.
En tanto el coordinador del PRI, Rubén Moreira logre vender caros los votos de los diputados del tricolor; pues se aferrará con dientes y uñas a Hidalgo, último bastión del PRI junto con el Estado de México.
El relevo de Ricardo Monreal
Ya se han mostrado muchos sucesos que indican la débil posición de Ricardo Monreal dentro del partido en el poder. Los vientos siguen soplando en su contra. La mano que mece la cuna comenzó su arrullo en diciembre pasado con la detención y prisión preventiva de su operador político en el senado, el emecista veracruzano Manuel del Río Virgen. A eso siguió la detención de su operador financiero y en seguida la suspensión, en sus funciones, de la alcaldesa de Cuauhtémoc, su ahijada política, Sandra Cuevas, de la coalición PRI-PAN-PRD; para quien operó el también ex delegado de la demarcación; en contra de la candidata de Morena, Dolores Padierna, en elección del año pasado.
A eso le siguió la rebelión al interior de su bancada, cuando 100 senadores votaron a favor de su relevo en la coordinación.
A estas manifestaciones políticas se suman hoy protestas sociales callejeras. En mitín afuera del recinto de San Lázaro la semana pasada, se colgó manta con foto de Monreal y la leyenda “traidor a la patria”. Este jueves otra protesta, pero afuera del Senado, de activistas de la CDMX y de Veracruz, destacó el nombre del zacatecano como el impulsor de agenda legislativa lesiva para México y en contra de los principios de AMLO.
Monreal tiene Covid-19.- Y si antes a los políticos se les declaraba enfermos para sacarlos de la escena; ahora el #Covid-19 es pretexto para ausentarse por decisión propia. El senador Ricardo Monreal ha informado que dio positivo y se mantendrá en casa siguiendo el tratamiento. En tanto, en la atmósfera se percibe el pronto relevo de Monreal en la coordinación de Morena en el Senado. ¿Olga Sánchez podría sucederlo?
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