El resurgimiento de los juegos de mesa ha sido un fenómeno notable en los últimos años, especialmente durante la pandemia, cuando las familias y amigos buscaban formas de entretenerse y conectarse en un entorno de confinamiento.
Estos juegos han evolucionado desde los clásicos como Monopoly y Risk hasta una amplia variedad de opciones modernas que abarcan diferentes temáticas, niveles de dificultad y mecánicas de juego.
La popularidad de los juegos de mesa en la actualidad se debe en parte a su capacidad para fomentar la interacción social, el pensamiento estratégico y la creatividad.
Además, han demostrado ser una herramienta efectiva para reducir el estrés y promover el equilibrio mental.
Los juegos de mesa también han sido reconocidos por su impacto simbólico, neurológico y social a lo largo de la historia, siendo utilizados como instrumentos de cambio mental y cultural en diferentes civilizaciones.
En el mercado actual, hay una gran cantidad de juegos de mesa altamente valorados y populares, como Catán, 7 Wonders, Patchwork y Zombicide.
Estos juegos ofrecen experiencias únicas y desafiantes para los jugadores, y su popularidad ha llevado a la creación de eventos y festivales dedicados a la cultura de los juegos de mesa, como el Festival Internacional de Juegos de Córdoba.
A pesar de su creciente popularidad, los juegos de mesa aún enfrentan desafíos en términos de reconocimiento y promoción por parte de las instituciones culturales.
Sin embargo, el creciente interés en estos juegos y su impacto en la sociedad sugiere que su relevancia y popularidad continuarán en aumento.
