Por Juan Pablo Ojeda
La mezcla explosiva entre política, celebridades y moda volvió a sacudir Wall Street este lunes. La marca American Eagle registró un impresionante aumento del 24 % en sus acciones tras los elogios del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a su reciente campaña publicitaria protagonizada por la actriz Sydney Sweeney, conocida por su papel en Euphoria.
El impulso bursátil llevó las acciones de la marca minorista a 13.28 dólares por unidad, con una capitalización que alcanzó los 1,860 millones de dólares, revirtiendo momentáneamente un año complicado de pérdidas y exceso de inventario.
¿Qué detonó la explosión mediática?
Todo comenzó cuando Trump fue informado por un periodista que Sweeney está registrada como votante republicana, lo que cambió por completo el tono de la conversación sobre la campaña. El mandatario no dudó en declarar que “le encanta el anuncio” y escribió en su red Truth Social que los jeans de American Eagle “vuelan de las estanterías”.
El comercial en cuestión juega con el doble sentido de la palabra “jeans” (vaqueros), que se pronuncia igual que “genes” en inglés, lo que desató críticas y acusaciones en redes sociales de que el mensaje podía interpretarse como una apología a rasgos genéticos vinculados a la blancura.
¿Publicidad o provocación?
Aunque la marca salió al paso asegurando que la campaña solo hace referencia a sus pantalones vaqueros, el mensaje ya había sido amplificado por millones. Según datos citados por medios económicos, el interés en Google por American Eagle alcanzó su punto más alto en 20 años, impulsado por el escándalo y la atención presidencial.
De la crisis a la cima… ¿temporal?
Cabe recordar que en mayo pasado, American Eagle anunció amortizaciones por 75 millones de dólares debido a un exceso de inventario y eliminó sus previsiones de negocio para el año, afectada por malas ventas y un entorno económico adverso.
Sin embargo, este nuevo episodio parece haberle devuelto momentáneamente el brillo a la marca. ¿Será suficiente para sostener el impulso o se trata solo de una llamarada mediática?
Lo cierto es que Sydney Sweeney, con su imagen, y Donald Trump, con su influencia, han vuelto a demostrar que la política y el espectáculo pueden ser una combinación explosiva… también en la bolsa.
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