Estados Unidos elevó la presión comercial sobre México y Canadá al plantear “docenas” de exigencias durante las conversaciones bilaterales que sostiene con ambos países, reveló el primer ministro canadiense, Mark Carney.
El mensaje es claro: Washington quiere llegar con fuerza a la renegociación del T-MEC en 2026, y ya comenzó a mover sus fichas.
“Decenas de asuntos” en discusión
Durante una conferencia de prensa en Ottawa, Mark Carney confirmó que las negociaciones comerciales con Estados Unidos incluyen una larga lista de demandas.
“Cada país tiene una serie de asuntos sobre la mesa. EE.UU. ha puesto esos asuntos sobre la mesa. Se trata de decenas de cuestiones”, explicó.
El primer ministro canadiense detalló que Washington mantiene al menos 54 asuntos pendientes específicamente con México, una cifra que muestra la magnitud de las tensiones comerciales en la región.
El sector lácteo, línea roja para Canadá
Uno de los puntos más delicados para Canadá es el sistema de gestión regulada del sector lácteo, una política agrícola vigente desde hace más de 50 años y reconocida dentro del T-MEC.
Carney fue tajante:
“Hemos sido claros sobre nuestro planteamiento. Lo mantendremos y lo seguiremos protegiendo”.
Este sistema limita la entrada de productos lácteos estadounidenses sin aranceles a solo 3.5% de la demanda total canadiense, lo que ha generado constantes fricciones con Donald Trump.
El expresidente estadounidense ha acusado en repetidas ocasiones a Canadá de imponer aranceles de hasta 400% a los lácteos de EE.UU., convirtiendo este tema en una de sus principales quejas comerciales.
Acuerdos sectoriales, cada vez más lejanos
Carney reconoció que es poco probable que Ottawa y Washington logren acuerdos sectoriales para reducir los aranceles que Estados Unidos impuso a productos estratégicos como:
- Acero
- Aluminio
- Energía canadiense
Actualmente, el acero canadiense enfrenta un arancel del 50%, una medida que ha afectado de forma directa a las exportaciones del país.
Todo apunta a la renegociación del T-MEC en 2026
El primer ministro canadiense dejó claro que la lista de demandas presentada por EE.UU. esta semana es solo el inicio.
“Todo va a ser incluido en las negociaciones del T-MEC”, afirmó Carney.
Esto confirma que Estados Unidos busca una revisión integral del tratado comercial que regula el intercambio entre México, Canadá y EE.UU. desde 2020.
Negociaciones rotas y tensiones políticas
En octubre, Canadá y Estados Unidos estuvieron cerca de alcanzar un acuerdo sobre las exportaciones de acero. Sin embargo, la relación se fracturó tras la emisión de anuncios canadienses en televisión estadounidense criticando los aranceles de Trump.
La reacción fue inmediata: Donald Trump suspendió las negociaciones, y desde entonces se ha negado a retomarlas, pese a los intentos del gobierno canadiense.
EE.UU. revela sus prioridades comerciales
El miércoles, el representante comercial de Estados Unidos, Jamieson Greer, presentó en el Congreso —en sesiones a puerta cerrada— las prioridades de su país de cara al T-MEC.
Entre los objetivos de Washington destacan:
- Eliminar el sistema de gestión de la producción agrícola de Canadá
- Reducir medidas proteccionistas en los sectores de:
- Cultura
- Medios de comunicación
Estas demandas anticipan una renegociación compleja y políticamente sensible, tanto para Canadá como para México.
Un escenario de presión regional
Las declaraciones de Mark Carney confirman que Estados Unidos ya comenzó a marcar el ritmo de las conversaciones comerciales en América del Norte. Con decenas de exigencias sobre la mesa y una renegociación del T-MEC en el horizonte, México y Canadá enfrentan un escenario de alta presión económica y política.
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