Por Juan Pablo Ojeda
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, respondió este martes a la moción presentada en el Congreso de Perú que busca declararla persona non grata, a raíz de su apoyo al expresidente peruano Pedro Castillo. Durante la conferencia matutina en Palacio Nacional, Sheinbaum dejó claro que no se ha entrometido en los asuntos internos del país sudamericano, aunque subrayó que Castillo vivió un golpe de Estado en diciembre de 2022.
“No es una agresión, recibí al abogado del presidente Pedro Castillo, que desde nuestro punto de vista vivió un golpe de Estado”, afirmó la mandataria mexicana, quien reiteró que seguirá el criterio de solidaridad hacia Castillo Terrones, tal como lo ha hecho el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador en casos similares, como con Ecuador.
El Congreso peruano aprobó en primera instancia, con 12 votos a favor y seis en contra, la moción en la Comisión de Relaciones Exteriores, que ahora deberá ser analizada por el pleno para su ratificación o archivo. La iniciativa fue impulsada por los congresistas fujimoristas Ernesto Bustamante y Patricia Juárez, así como por la derechista María del Carmen Alva.
Según los proponentes, Sheinbaum “mostró una conducta hostil hacia el Perú desde que asumió su cargo en octubre de 2024”, al desconocer la sucesión constitucional tras la vacancia de Castillo y al referirse a él como “legítimo presidente del Perú”. Bustamante calificó las declaraciones de la mandataria mexicana como un agravio a la institucionalidad peruana y aseguró que la moción busca castigar sus declaraciones “altisonantes y ofensivas para el Perú y para la constitucionalidad y el respeto a las instituciones”.
A pesar de la moción, Sheinbaum dejó claro que México mantendrá su posición: un respaldo a la legalidad y la solidaridad con quienes, según su perspectiva, han sido víctimas de procesos políticos irregulares.
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