Por Bruno Cortés
El diputado Raúl Bolaños-Cacho Cué, vicepresidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, no se anduvo con rodeos: “El clima ya nos está pasando la factura.” En medio de las lluvias torrenciales que han dejado daños en varios estados, el legislador advirtió que México necesita tomarse en serio el cambio climático, no solo reaccionar cada vez que una tragedia ocurre.
Con voz firme, Bolaños-Cacho explicó que estas lluvias no son casualidad, sino el resultado de años de desatención al medio ambiente. “Si no tomamos cartas en el asunto con una agenda real, las estaciones van a ser cada vez más intensas: lluvias más fuertes, sequías más largas y fríos más duros”, alertó. Dicho de otra forma: el clima está desequilibrado y ya lo estamos pagando.
El diputado del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) reconoció el trabajo de la presidenta Claudia Sheinbaum, quien ha recorrido personalmente los estados más golpeados —San Luis Potosí, Querétaro, Puebla, Hidalgo y Veracruz— para evaluar los daños. Dijo que su liderazgo ha sido clave: “Veo a la presidenta recorriendo municipios, trabajando con gobernadores de todos los partidos. Incluso mandatarios que no son de Morena han reconocido su labor.”
En un tono más conciliador que político, el legislador pidió que no se politicen las tragedias, porque cuando la ayuda se vuelve tema de partido, quienes terminan perdiendo son las familias afectadas. “Cuando se politiza una tragedia, se pierde mucho como sociedad. Este no es momento de competir, sino de cerrar filas y apoyar a los damnificados”, insistió.
Bolaños-Cacho recordó que aunque la Conagua y algunos gobiernos estatales emitieron alertas, la intensidad de las lluvias superó cualquier pronóstico. Evacuar a comunidades enteras en pocas horas, dijo, es prácticamente imposible. Por eso valoró que el Gobierno Federal esté realizando censos de daños y enviando apoyos directos, algo que consideró una respuesta “rápida y ordenada”.
El legislador también subrayó que el país sí tiene recursos y capacidad para reaccionar ante emergencias, pero lo que hacía falta era “liderazgo y coordinación”. En su opinión, Sheinbaum ha sabido tomar el mando de manera inmediata, lo que ha permitido que la atención llegue sin retrasos.
Además, hizo un llamado claro a los gobiernos estatales y municipales: mantener en buen estado los sistemas de drenaje y mejorar la prevención. Cada año, dijo, se repite el mismo ciclo: las lluvias colapsan las ciudades, se inundan las calles y se lamentan pérdidas que podrían evitarse con infraestructura adecuada y educación ambiental.
El diputado recordó que la temporada de huracanes terminará hasta el 30 de noviembre, por lo que pidió no bajar la guardia. Mientras tanto, el PVEM instaló su propio centro de acopio en apoyo a las comunidades afectadas, que enviará los víveres al centro general de la Cámara de Diputados.
El mensaje de Bolaños-Cacho fue claro y directo: no basta con reconstruir después del desastre, hay que prevenir antes de que ocurra. Y aunque la lluvia se lleve techos, caminos o cosechas, lo más peligroso —dice— sería dejar que se lleve también la conciencia ambiental del país.
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