Por Juan Pablo Ojeda
El futbol mexicano enfrenta un nuevo escándalo este martes 28 de octubre, luego de que se diera a conocer una orden de aprehensión contra Jesús Martínez, presidente de Grupo Pachuca, por el delito de desobediencia de particulares agravado. La orden también alcanza a Hipólito Gerardo Cabrera Acosta, representante legal del club.
De acuerdo con información difundida por Diario Reforma, ambos involucrados incumplieron en un par de ocasiones con la orden de presentarse a la audiencia inicial donde se formularía la imputación en su contra. Al no presentarse ni justificar su ausencia, el juez declaró a Martínez y Cabrera sustraídos de la acción de la justicia, lo que significa que una vez cumplidas las órdenes de aprehensión, ambos serían remitidos al Reclusorio Preventivo Varonil Norte de la Ciudad de México.
El delito de desobediencia de particulares se aplica cuando un ciudadano desacata una resolución emitida por una autoridad judicial o administrativa, y en este caso está vinculado a conflictos legales sobre transmisiones deportivas. El origen del problema se remonta al momento en que Pachuca y León rescindieron contratos con la filial mexicana de Fox (Grupo Lauman) para cerrar un acuerdo con Fox Corp/Tubi, provocando bloqueos y disputas legales sobre quién tenía derechos de transmisión.
Grupo Lauman alegó que aún tenía derechos sobre las transmisiones y demandó tanto a Grupo Pachuca como a Fox Corp. La disputa incluyó demandas en México y Estados Unidos, amparos y medidas cautelares que complicaron la difusión de los partidos, dejando sin señal a algunos operadores mientras se definía la legalidad de los contratos.
El juez advirtió que si el desacato por parte de Martínez y Cabrera continúa, podrían enfrentarse a sanciones más severas e incluso a consecuencias penales mayores, lo que sería un precedente histórico dentro del futbol mexicano, dado que no existen casos recientes con antecedentes similares en la liga profesional.
Este caso mantiene en alerta a la afición y a los operadores de medios deportivos, mientras la resolución del conflicto legal marcará un precedente importante sobre la relación entre clubes, transmisiones y cumplimiento de órdenes judiciales.
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