Por Juan Pablo Ojeda
La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo informó que México y Estados Unidos están reforzando la colaboración bilateral para combatir el contrabando y robo de combustible, un problema que impacta a ambos países. Durante la conferencia ‘La Mañanera’, destacó que la cooperación se centra en el intercambio de información aduanal, la coordinación de controles y la detección de cargamentos sospechosos antes de que crucen la frontera, lo que permite prevenir la entrada ilegal de combustibles por tierra, ferrocarril y vía marítima, así como esclarecer la participación de grupos delictivos en ambos lados de la frontera.
Sheinbaum señaló que parte del combustible ilegal podría provenir de petróleo crudo mexicano que se refina en Estados Unidos y regresa al país sin pagar impuestos. “Aún no tenemos datos concretos sobre esta práctica, pero nos interesa mucho la información, porque ellos tienen controles en sus aduanas y nosotros en México”, indicó, resaltando que el seguimiento de la información compartida es clave para detectar movimientos ilícitos.
La mandataria subrayó que la llegada de combustible ilegal ha disminuido desde marzo respecto a principios de año y que el trabajo conjunto con Estados Unidos no solo incluye el rastreo de cargamentos, sino también la investigación de los grupos delictivos involucrados, algunos de los cuales operan en ambos países. Este enfoque integral permite anticipar movimientos ilegales y actuar antes de que los combustibles ingresen al mercado mexicano de forma irregular.
Además, la presidenta detalló que la coordinación incluye la identificación de embarcaciones y transporte terrestre implicado en la transferencia de combustible. La información obtenida por las aduanas estadounidenses permite intervenir rápidamente en caso de irregularidades, evitando que los cargamentos sean desviados o alterados para su comercialización ilegal.
Sheinbaum enfatizó que los controles y la cooperación internacional complementan las investigaciones locales, donde ya se han identificado grupos dedicados al robo y contrabando de combustibles. Las acciones coordinadas permiten no solo reducir la disponibilidad de combustible ilegal, sino también identificar las redes criminales y sus posibles vínculos en Estados Unidos.
Finalmente, la mandataria destacó que el intercambio de información y la colaboración en investigación representan un componente estratégico de la política de seguridad energética de México. La reducción en la llegada de combustible ilegal desde principios de año indica que la estrategia conjunta comienza a rendir resultados, aunque subrayó la importancia de mantener la vigilancia y coordinación para evitar repuntes en estos delitos.
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