Por Juan Pablo Ojeda
En la política mexicana los pleitos parecen no tener fin, y menos cuando se trata de Alejandro “Alito” Moreno, líder nacional del PRI. Ahora fue Layda Sansores, gobernadora de Campeche, quien volvió a ponerlo en la mira al asegurar que existen “pruebas infinitas” para quitarle el fuero.
Durante su ya conocido programa Martes del Jaguar, Sansores recordó que la Fiscalía Anticorrupción de Campeche mantiene procesos abiertos contra el exgobernador por presunto desvío de recursos públicos. De hecho, aseguró que cuentan con suficiente material para promover varias solicitudes de procedencia. En palabras simples: si una no pasa, ella tiene otra lista para presentar.
La mandataria morenista explicó que uno de los expedientes contra Alito fue cerrado con ayuda de legisladores, pero que ya abrieron otro y están dispuestos a seguir hasta que prospere: “No nos damos por vencidos. Tenemos material para el infinito”. Sansores también señaló que en toda la historia del país apenas existe un antecedente de juicio de procedencia, lo que hace más complicada la ruta legal, aunque confía en que hoy existe una comisión instructora más equilibrada que en el pasado.
El señalamiento central es fuerte: la Fiscalía acusa a Moreno de haber desviado más de 83 millones de pesos durante su gestión como gobernador de Campeche. No es la primera vez que enfrenta un proceso de este tipo; en el sexenio pasado también se intentó desaforarlo por corrupción, pero la solicitud quedó archivada.
Sansores incluso se refirió al comportamiento reciente del priista, asegurando que la posibilidad de perder el fuero lo tiene nervioso y por eso “se fue a Washington a quejarse”.
Mientras tanto, el procedimiento sigue su curso en la Cámara de Diputados. Según Hugo Eric Flores, presidente de la Sección Instructora, ya está en marcha la revisión del caso. El siguiente paso será reunir a los integrantes de la comisión y posteriormente emitir un dictamen. Si la solicitud se desecha o se admite, el tema tendrá que pasar al Pleno durante el periodo ordinario de sesiones, donde finalmente se decidirá si Alito Moreno enfrenta la justicia sin el escudo del fuero.
La batalla apenas comienza, y lo cierto es que el pulso entre Morena y el PRI no solo se libra en las urnas o en el Congreso, también se está jugando en los tribunales y con micrófonos en mano.
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