La presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Kenia López Rabadán, dejó claro que la manera más directa, ética y eficiente de que los ciudadanos conozcan lo que sucede en el Congreso es a través de los medios estatales de información. En otras palabras, si quieres enterarte de cómo se mueven las leyes y cómo se decide el presupuesto del país, los medios locales son la vía más confiable.
En una charla vía Zoom con periodistas de diversos estados como Jalisco, Sonora, Guanajuato, Coahuila y Nuevo León, López Rabadán destacó que este tipo de comunicación permite llevar la información del Palacio Legislativo de San Lázaro a todos los rincones del país, porque cada diputado representa al pueblo y cada ciudadano tiene derecho a saber qué se discute y decide en su nombre.
Durante la conversación, la presidenta abordó varios temas que están sobre la mesa: desde la Ley de Amparo, hasta la Ley de Ingresos y el Presupuesto de Egresos para el próximo año. Sobre el primero, la Ley de Amparo, explicó que la discusión será “altamente jurídica”, sobre todo por el principio de no retroactividad: la idea de que nadie puede ser afectado por una ley después de que ya sucedieron los hechos, algo que protege los derechos humanos y que lleva vigente en México desde 1824. Cambiar esto, advirtió, modificaría cómo se presentan y resuelven los amparos en todo el país.
La diputada adelantó que la semana próxima será intensa, con sesiones largas y un trabajo legislativo muy activo, porque los temas que están por dictaminarse son de gran relevancia para la vida de los mexicanos. Además, destacó que mantener un diálogo permanente con los medios permitirá que la información llegue de manera directa, clara y sin intermediarios que la distorsionen.
Con esto, López Rabadán busca que la Cámara de Diputados no sea un lugar lejano, lleno de trámites y papeles, sino un espacio donde los ciudadanos puedan enterarse de lo que se decide, entender cómo afecta su economía y sus derechos, y sentirse parte del proceso democrático. La política, al final, también es cuestión de comunicación.
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