Por Juan Pablo Ojeda
Este martes 23 de septiembre se espera que se defina la situación jurídica de Hernán Bermúdez Requena, identificado como líder del grupo delictivo La Barredora. La audiencia inicial de imputación se realiza de manera remota desde los juzgados en Villahermosa, Tabasco, y tiene como objetivo determinar si Bermúdez Requena será vinculado a proceso por los delitos de extorsión, secuestro exprés y asociación delictuosa.
El exsecretario de Seguridad Pública de Tabasco fue trasladado a México tras ser expulsado por Paraguay, país donde fue detenido el 13 de septiembre tras ingresar de manera irregular por la frontera de Foz de Iguazú, que conecta con Ciudad del Este, procedente de Brasil. Según las autoridades paraguayas, Bermúdez Requena pretendía instalar operaciones de su grupo criminal en el país, pero fue interceptado antes de poder consolidar cualquier red delictiva.
El titular de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) de Paraguay, Jalil Rachid, advirtió que el presunto líder de La Barredora se mantenía en la clandestinidad, moviéndose únicamente con un círculo muy cercano, entre los que se encontraba su esposa, quien también quedó bajo disposición de las autoridades paraguayas. Rachid indicó que de haber permanecido más tiempo, Bermúdez Requena podría haber establecido una red criminal en Paraguay.
Tras su expulsión, Bermúdez Requena llegó a México el jueves 18 de septiembre. Su arribo se realizó primero al Aeropuerto de Tapachula a las 11:11 horas y posteriormente fue trasladado en un segundo vuelo al aeropuerto de Toluca, Estado de México, para ser internado en el penal federal de El Altiplano, uno de los centros penitenciarios de máxima seguridad del país.
La audiencia de este martes permitirá al Ministerio Público presentar los datos de prueba necesarios para vincularlo a proceso. Entre las acusaciones en su contra se incluyen delitos de extorsión, secuestro exprés y asociación delictuosa, que de ser probados podrían derivar en sanciones severas.
El caso de Bermúdez Requena ha generado atención tanto en México como en Paraguay, debido a su perfil de exfuncionario y al liderazgo del grupo delictivo La Barredora, una organización que ha estado involucrada en diversos delitos en Tabasco y otras regiones del país. Las autoridades mexicanas mantienen especial atención en el caso para garantizar el cumplimiento de la justicia y evitar la reincidencia de sus operaciones criminales.
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