Noticias de México

Historia de lo inmediato

El freno a la Ley de Amparo: una pausa que la oposición llama “victoria ciudadana”

Por Bruno Cortés

 

En el Congreso mexicano, donde las discusiones suelen ser tan densas como el tráfico en Insurgentes un lunes, algo inusual ocurrió: la Cámara de Diputados detuvo el avance de la nueva Ley de Amparo, una reforma que había levantado críticas por parte de juristas, académicos y la oposición. Los legisladores del PAN no tardaron en calificar este aplazamiento como una “victoria ciudadana”.

¿Por qué tanto alboroto con una ley que suena tan lejana al ciudadano común? El amparo es, en palabras simples, la herramienta legal que tiene cualquier persona para defenderse del abuso del poder: del gobierno, de una autoridad o incluso de una ley injusta. Es como el botón de emergencia del sistema judicial mexicano, y tocarlo implica que el Estado debe escuchar. Por eso, cualquier intento de modificarlo prende las alarmas entre abogados y defensores de derechos humanos.

El diputado Federico Döring Casar, uno de los más activos en esta causa, explicó que el lunes 6 de octubre se tenía programado aprobar un dictamen que, según él, “seguía siendo tóxico e inconstitucional”. El hecho de que no se haya votado ese día fue, dice, “una victoria de los ciudadanos”. Y no lo dice por decirlo: detrás de esta pausa hay presión social, universidades, colegios de abogados y colectivos que exigieron abrir el debate.

Döring hizo un llamado a que la gente no se quede viendo desde la barrera: “Participen, inscríbanse en el micrositio de la Cámara de Diputados, traigan sus propuestas, es un día de victoria ciudadana”, subrayó. El mensaje es claro: si la ley que protege tus derechos va a cambiar, tienes derecho a opinar cómo.

Desde otra trinchera, el diputado César Israel Damián Retes, de la Comisión de Justicia, recordó para qué sirve el amparo: “para defender a las familias de los abusos del poder”. A su juicio, lo que se frenó fue un dictamen “mal hecho”, aprobado en el Senado por la mayoría de Morena, y que ponía en riesgo derechos ganados desde hace décadas. Su llamado también fue a abrir el diálogo: “Hoy defendimos a las familias, y eso es un triunfo ciudadano”.

El tema ahora pasa a la Junta de Coordinación Política (Jucopo), donde se definirán las reglas del llamado Parlamento Abierto —una especie de foro público donde cualquier persona interesada puede participar, opinar y hacer propuestas. El panista confía en que el diputado Ricardo Monreal, quien encabeza la Jucopo, facilite ese espacio de diálogo.

La diputada Nancy Olguín Díaz no se guardó palabras: calificó la reforma avalada por el Senado como “mal hecha y mal trazada”, mientras que Amparo Lilia Olivares Castañeda aprovechó para lanzar una invitación directa: “Ésta es tu oportunidad para participar”.

Más allá de los discursos, el mensaje político es claro: la oposición encontró en este aplazamiento una bandera ciudadana. En un Congreso donde Morena ha tenido la mayoría suficiente para sacar adelante casi cualquier iniciativa, que una ley se detenga por presión social es, sin duda, un evento poco común.

El debate sobre la Ley de Amparo aún no termina. Pero, por ahora, los diputados del PAN celebran haber ganado tiempo, y los ciudadanos tienen la oportunidad de sumarse a la conversación sobre una de las piezas más importantes del sistema legal mexicano.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *