Por Juan Pablo Ojeda
En un giro diplomático que podría marcar un antes y un después en la guerra en Ucrania, el presidente Volodímir Zelenski respaldó la propuesta del exmandatario estadounidense Donald Trump de realizar una cumbre trilateral con el presidente ruso Vladímir Putin. La reunión, de concretarse, abriría un canal directo entre los tres líderes en busca de una salida al conflicto que ya supera los dos años.
Zelenski anunció que viajará a Washington el lunes 18 de agosto por invitación de Trump para “abordar todos los detalles sobre cómo poner fin a la matanza y a la guerra”. Así lo expresó el propio mandatario ucraniano en una publicación en su cuenta oficial de X (antes Twitter), donde también reveló que mantuvo una “larga y sustancial” conversación con Trump, de alrededor de una hora, antes de que se sumaran líderes europeos a la videollamada durante otros 30 minutos.
“Ucrania reafirma su disposición a realizar el máximo esfuerzo para lograr la paz”, escribió Zelenski, dejando clara su disposición al diálogo.
Aunque durante meses el presidente ucraniano había insistido en la necesidad de un encuentro directo con Putin, ahora apoya la idea de que se haga en un formato trilateral, con Estados Unidos como mediador directo.
“A nivel de líderes se pueden abordar cuestiones clave y un formato trilateral es adecuado para esto”, afirmó, en lo que parece una apuesta clara por involucrar de lleno a Washington en las negociaciones.
El anuncio llega apenas un día después de que Trump y Putin mantuvieran un encuentro en Alaska, que si bien no produjo un acuerdo inmediato de alto el fuego, sí fue calificado por el exmandatario estadounidense como “extremadamente productivo”.
Zelenski subrayó también la importancia de que los países europeos participen en todas las fases del proceso, tanto para garantizar la transparencia como para construir garantías de seguridad sólidas para Ucrania, con el respaldo conjunto de Estados Unidos y sus aliados.
Este posible nuevo canal diplomático abre una ventana de oportunidad en un conflicto que ha generado una de las mayores crisis geopolíticas del siglo. La presencia activa de Trump —quien busca volver a la Casa Blanca— y la eventual disposición de Putin a sentarse a negociar directamente, podrían redefinir el equilibrio de fuerzas en la región y alterar el rumbo de la guerra.
Por ahora, todos los ojos estarán puestos en Washington el próximo lunes.
Deja una respuesta