No hay nada mejor para cuidar tu melena que sucumbir cada semana a las mascarillas naturales para el pelo. Porque, si algo es cierto, es que cada uno de los cuidados que le das contribuyen notablemente a la apariencia y estado de tu cabello.
Desde reparar las puntas abiertas hasta recuperar los chinos, existen mascarillas naturales para cada problema capilar que te impide tener una cabellera perfecta.
Y es que las mascarillas capilares son tus mejores aliadas para conseguir esa melena que siempre soñaste. ¿No nos crees? Sólo basta con darle una oportunidad a estas sencillas mezclas para comprobar su poder.
Mascarilla de aceite de coco y miel
Esta mezcla es la mascarilla estrella para reparar y suavizar el cabello sin falla. Por un lado, el aceite de coco es perfecto para humectar las hebras capilares mientras que la miel es un poderoso regenerador natural que reparara el daño en tu cabello.
Consíguela colocando en un bowl pequeño una cucharada de aceite de coco, dos de miel y una de tu acondicionador favorito (ayudará a ablandar la mezcla para que sea más fácil aplicarla). Déjala reposar sobre tu melena entre 20 y 30 minutos y después lava perfectamente. ¡Notarás la diferencia radical.
Mascarilla de aguacate y aceite de almendras
Esta mezcla es perfecta si sufres de cabello seco y opaco o si tu principal preocupación es el frizz. Y es que gracias a las propiedades humectantes y regeneradoras, esta mezcla consigue cerrar la cutícula, haciendo que tu cabello luzca mucho más sano y te olvides del encrespamiento.
Obtén esta mascarilla machacando el aguacate y mezclándolo con una cucharada de aceite de almendras hasta obtener una pasta homogénea.
Aplícalo de medios a puntas y permite que actúe durante 20 minutos. Después, enjuaga y acondiciona con un sistema de lavado ultra humectante. ¡Le dirás adiós a la resequedad en menos de lo que te imaginas!
Mascarilla de tomate y aceite de oliva
Gracias a sus propiedades antioxidantes, el tomate es un increíble aliado para restaurar el cabello dañado, por lo que si sufres de puntas abiertas, esta mascarilla será tu favorita. Además, al mezclarlo con las propiedades humectantes del aceite de oliva, es perfecto para conseguir una melena mucho más suave y brillante.
Prepárala licuando un tomate maduro (con todo y cáscara) y añadiendo una cucharada sopera de aceite oliva. Después, aplícalo sobre tu cabello de medios a puntas y déjalo actuar durante 20 minutos. Verás que después de lavar tu cabello, se sentirá mucho más suave y las cutículas capilares lucirán más cerradas.
