• 2 de mayo de 2024 23:01

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¿Qué hiciste con las sobras de la cena de Navidad?

*Desperdicio de alimentos puede causar un fuerte impacto ambiental

Daysi Casas

CDMX, 26  de diciembre, 2020 (Maya Comunicación).- Es muy común que después de la cena de navidad la cantidad de alimento sobrante, mejor conocido como “las sobras”, te obligue a comer pavo el resto de la semana, pero ¿sabías que el desperdicio de alimento es una de las principales causas del cambio climático y la desnutrición en el mundo?

En el mundo un 14% de los alimentos, con un valor de 400 000 millones de dólares, se pierde entre la cosecha y la distribución. En México el desperdicio de alimentos alcanza el 34.7% de lo que se produce en el país, siendo la carne de cerdo el producto que más se desperdicia con el 40% de su producción, pescado 37%, res 35%, pollo 29% y tortilla 28%, esto de acuerdo con el Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberanía Alimentaria (CEDRSSA) de la cámara de diputados.

Gran parte del desperdicio de alimentos no depende de nuestros hábitos alimenticios o de terminar nuestras comidas, sino de su almacenamiento y distribución. A nivel del consumidor el desperdicio ocurre principalmente por una mala planificación en las compras, agravada por la actual pandemia de Covid-19, en la que los consumidores realizaron compras compulsivas que generaron escases y demanda excesiva de los alimentos básico.

De acuerdo con datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo (Coneval), el almacenamiento inadecuado de los alimentos, así como la mala logística e infraestructura para su transporte, acorta su vida útil, de tal manera que, en México, se desperdician 20.4 millones de toneladas de alimentos cada año, un promedio de casi 158 kilos por persona, que se traduce, según datos del Banco Mundial, en pérdidas económicas estimadas en 491,000 millones de pesos al año.

Por otro lado, el desperdicio de alimentos también tiene un gran impacto sobre el medio ambiente, pues al existir un mayor crecimiento demográfico, se produce una mayor explotación de los recursos naturales para la alimentación y las emisiones de gases de efecto invernadero se elevan, generando 36 millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2), lo que corresponde a las emisiones anuales de casi 16 millones de vehículos.

La huella hídrica del desperdicio es también masiva. El agua utilizada en producir alimentos que luego terminan en la basura es de 40,000 millones de metros cúbicos, similar al consumo de agua de todos los habitantes del país durante 2.4 años. Además de que en México, 20 de cada 100 personas enfrentan pobreza por falta de acceso a la alimentación según datos recientes del Coneval, por lo que en 2019, la Asamblea General de las Naciones Unidas designó el 29 de septiembre como el Día Internacional de Conciencia de la Pérdida y Desperdicio de Alimentos, para reconocer el papel fundamental que desempeña la producción sostenible de alimentos, para generar seguridad alimentaria.

La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura FAO, publicó medidas fáciles a seguir para desperdiciar menos alimentos o reaprovecharlos:

  1. Adopte una dieta más saludable y sostenible
  2. Compre solo lo que necesita
  3. Elija frutas y hortalizas frescas
  4. Almacene los alimentos que prevea consumirá
  5. Revise el etiquetado de los alimentos
  6. Haga uso de los alimentos desperdiciados
  7. Apoye a los productores de alimentos locales
  8. Coma más legumbres y verdura
  9. Comparta con trabajadores y vecinos la comida que ya no consumirá

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