Cuando el Día de Muertos se acerca en México, es tiempo de honrar a los seres queridos que partieron, y uno de los aspectos más destacados de esta celebración es la deliciosa gastronomía mexicana. Es una oportunidad para deleitar a los difuntos con sus platillos favoritos, una manera de conectar con ellos a través de la comida y recibirlos con la mesa puesta. En Yucatán, esta festividad se conoce como «Hanal Pixán» o «Janal Pixán», que se traduce como la «comida de las ánimas».
Orígenes Mayas y la Fusión con la Fe Católica
En la antigüedad, los mayas no tenían una fecha específica para honrar a sus difuntos, pero creían en el peregrinar de los muertos a través del Yaxché, el árbol sagrado de la ceiba, en busca de su destino final en el Xibalbá. Los altares u ofrendas desempeñaban un papel fundamental, ya que a través de figuras de barro representaban a sus seres queridos difuntos, manteniendo viva su presencia en el hogar.
Con la llegada de los evangelizadores, se decidió asignar una fecha que coincidiera con las festividades católicas para honrar a los mártires y santos. Así, Hanal Pixán se celebra desde la víspera del 30 de octubre hasta el 2 de noviembre, con un enfoque particular en la recepción de las ánimas que no tienen familiares el 30, los niños el 31, los adultos el día 1, y finalmente, el día 2 se dedica a todos los santos.
La Celebración de Hanal Pixán
Hanal Pixán es un momento en el que se cree que las ánimas tienen «permiso» para visitar a sus seres queridos. Las familias yucatecas reciben a sus difuntos con ofrendas que incluyen alimentos y bebidas favoritas a través de un altar. Este acto de amor y remembranza es fundamental para mantener viva la conexión con los seres queridos que han fallecido.
Uno de los momentos culminantes de esta celebración es el día 30 de noviembre, cuando las familias se reúnen nuevamente para despedir a las ánimas que vinieron a visitar. Preparan platillos tradicionales que solo se disfrutan durante esta época, como el «mucbipollo». Este es un tipo de tamal hecho con masa de maíz y manteca, relleno de carne de pollo y cerdo condimentada con tomate y chile. Se cocina con una de las técnicas culinarias más tradicionales de la región, conocida como «el entierro» o «pib». Acompañado de una deliciosa salsa de chiltomate o chile habanero, el mucbipollo es un festín para el paladar.
Para complementar esta festividad gastronómica, los yucatecos preparan una refrescante ensalada llamada «xec», que incluye naranja, mandarina, jícama y chile molido. Esta mezcla fresca y picante es ideal para las tardes calurosas de la península y se combina perfectamente con el sabor del mucbipollo.
Por supuesto, ningún altar de muertos en Yucatán estaría completo sin los dulces típicos de papaya, coco y pepita, además de un rico atole y tamales.
Sabores de Yucatán: Una Invitación a Descubrir la Tradición
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Hanal Pixán es más que una celebración, es un testimonio de la profunda conexión entre la comida y las tradiciones en Yucatán, donde los sabores perduran incluso después de la muerte, invitando a todos a disfrutar de esta experiencia única y deliciosa.
