Ciudad de México, 29 de enero de 2024.- La Secretaría del Medio Ambiente (SEDEMA) de la Ciudad de México ha dado un paso gigante en la lucha contra el cambio climático. En el marco del Día Internacional por la Reducción de las Emisiones de CO2, la SEDEMA anunció que, gracias al Programa Ambiental y de Cambio Climático (PACC) 2019-2024, la Ciudad de México ha superado su meta de reducir el 10% de las emisiones de dióxido de carbono equivalente (CO2e) establecida para 2024. Este logro representa una disminución de 2 millones 260 mil 656 toneladas anuales de gases de efecto invernadero, lo que equivale a un avance del 102.7% respecto a la meta propuesta.
La doctora Marina Robles García, titular de la SEDEMA, destacó la importancia de los siete Ejes Estratégicos del PACC, que han involucrado la mejora del transporte público, la transición a energías limpias, el incremento de vegetación en la ciudad, el manejo de ecosistemas como humedales, la recuperación de bosques, la mejora del espacio público y la calidad del aire. Estas acciones se basan en la innovación, la ciencia, la tecnología y la participación ciudadana.
Cada uno de estos ejes ha contribuido significativamente a la reducción de emisiones. Por ejemplo, el Eje de Revegetación del Campo y la Ciudad ha permitido una mitigación de 33 mil 803 toneladas de CO2e, mientras que el Eje de Basura Cero ha logrado una mitigación de 659 mil 414 toneladas de CO2e.
La transformación ambiental de la Ciudad de México es notable, especialmente si se considera que en la década de 1990 era una de las ciudades más contaminadas del mundo. Hoy, se ha convertido en un referente de esperanza y un ejemplo de cómo es posible revertir el deterioro ambiental y social. Este trabajo ha llevado a la Ciudad de México a recibir 24 premios en materia ambiental y de cambio climático, incluyendo reconocimientos a nivel global y nacional por parte de organizaciones como WWF y el Carbon Disclosure Project (CDP).
La SEDEMA recalca que estos esfuerzos no solo buscan reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, sino también mejorar las condiciones de bienestar de la ciudad y sus habitantes, aumentar la biodiversidad y ampliar las áreas verdes públicas.
“La Ciudad de México le abre las puertas a la sustentabilidad y se compromete con la mejora de las condiciones ambientales y la calidad de vida de las personas que habitan en ella”, concluyó la doctora Robles García.
