CDMX, 12 de diciembre 2020.- El gobierno de Estados Unidos reaccionó hoy contra una ley de México que regula la actuación de sus agentes de inteligencia que operan en el país, especialmente la DEA.
El titular del Departamento de Justicia estadounidense, William P. Barr, expresó su ‘preocupación’ por la reciente reforma a la Ley de Seguridad Nacional, que regula la actuación de la comunidad de inteligencia norteamericana y de otros países y aclara que no pueden actuar impunemente como hasta ahora.
En un comunicado a las autoridades mexicanas, el procurador expresó que su organismo está comprometido a trabajar con el gobierno de México en el combate a criminales que amenacen a ambas naciones y ‘nos perturba’ que se estudie en el Congreso de México esa reforma, pues tendría el efecto de hacer la cooperación más difícil.
Señala que esa cooperación está diseñada para atender de forma conjunta desafíos comunes, y en lo que observadores interpretan como una velada advertencia, agrega que ‘es por eso que, por ejemplo, Estados Unidos recientemente devolvió al exsecretario (Salvador) Cienfuegos, con el fin de que pueda ser investigado ahí’.
Precisamente la arbitraria detención y enjuiciamiento del exgeneral fue la chispa que detonó la decisión de México de regular la actividad de la Administración de Control de Drogas (DEA) y demás organismos de inteligencia de Estados Unidos, pues violan el principio que ahora esgrime Barr.
El procurador norteamericano advierte que la reforma a la Ley de Seguridad Nacional ‘haría que estuvieran menos seguros los ciudadanos, tanto de México como de Estados Unidos. La aprobación de esta legislación sólo puede beneficiar a las organizaciones trasnacionales violentas y a otros delincuentes que estamos combatiendo de manera conjunta’, insistió, afirmación no compartida por los mexicanos.
Ya el Senado avaló el proyecto de ley y falta ahora que lo haga la Cámara de Diputados.
