Ciudad de México, 22 de diciembre de 2023 – Organizaciones ambientalistas han expresado su preocupación ante la posible aprobación de cambios en la Ley General de Vida Silvestre durante el próximo periodo de sesiones en el Senado mexicano. Estos cambios podrían permitir la captura de delfines con fines de «enseñanza», lo que implicaría un impulso a la explotación de mamíferos marinos en cautiverio en México.
Las organizaciones reconocieron que el Senado ha aprobado medidas que contribuyen a la protección de mamíferos marinos en cautiverio, incluyendo prohibiciones de su uso en espectáculos fijos y de su reproducción en cautiverio. Sin embargo, están alarmadas por una minuta aprobada por los diputados que propone modificar el artículo 60 BIS de la Ley General de Vida Silvestre.
Desde 2002, esta ley prohíbe la captura comercial o de subsistencia de delfines, con excepciones limitadas a la investigación científica y la educación superior por instituciones acreditadas. Sin embargo, la modificación propuesta debilita estos requisitos y abre la puerta a capturas comerciales bajo el pretexto de «propósitos de enseñanza».
Organizaciones como la Alianza para la Defensa Ambiental, Anima Naturalis, Comarino y Grupo Gema del Mayab advierten que este cambio podría ser aprovechado por la industria de los delfinarios, representando un grave retroceso legislativo y un impacto negativo en las poblaciones de mamíferos marinos en riesgo.
Esta preocupación se extiende a las recomendaciones de organizaciones nacionales e internacionales, así como de académicos y expertos que participaron en el Parlamento Abierto del 11 de octubre, quienes han aconsejado al Senado en contra de esta modificación.
Ante esta situación, las organizaciones ambientalistas instan al Senado a mantener su compromiso con la protección de los mamíferos marinos, evitando retrocesos que perjudiquen a las especies y cediendo ante presiones económicas de la industria de los delfinarios. Con este llamado, buscan asegurar que la legislación mexicana continúe avanzando en la protección de la vida silvestre, manteniendo el Principio de Progresividad en Derecho.
