Ciudad de México, 21 de septiembre de 2020. – Más de 28 mil intelectuales y profesionales de México firmaron un documento de apoyo al presidente Andrés Manuel López Obrador que circula hoy, como réplica a otro publicado por 650 presuntos eruditos para pedir la renuncia del mandatario.
Entre los supuestos ilustrados se incluyen dos connotados corruptos que aparecen en las largas listas de acusados del exdirector general de Pemex Emilio Lozoya: el expresidente Felipe Calderón y el excanciller de Vicente Fox, Jorge G. Castañeda, conocido conservador político del Partido Acción Nacional.
El periodista e investigador Teodoro Rentería, señala en su columna Comentario a tiempo, que ‘basta tener en cuenta solamente el hecho de que en la lista está Calderón para que el documento quede ipso facto descalificado, amén de otros muchos que no valen la pena mencionar’.
Los miles de firmantes de la réplica aseguran que no se puede demostrar hasta ahora ni un solo acto de censura por parte del gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Sus organizadores señalan como extraordinario el hecho de que dicho documento denominado ‘Por la liberad, contra los privatizadores de la palabra’ se abrió para su firma el 18 de septiembre y el día 20 ya contaba con más de 28 mil rúbricas.
En los más de 21 meses transcurridos desde el 1 de diciembre de 2018 nadie ha sido presionado al silencio por el Ejecutivo Federal, ningún informador ha sido hostigado, despedido, detenido, procesado, torturado, desaparecido o asesinado por consigna de la Presidencia y el debate público está más vivo y vibrante que nunca en la historia moderna del país, rebate el texto al de los acusadores.
Lo claro es que los ‘eruditos’ querían suprimir el debate, amordazar al presidente y reinstaurar el monólogo y la verdad única que imperó hasta hace dos años bajo el corrupto régimen neoliberal y el aparato mediático oligárquico en el que muchos de los firmantes aparecían como amos y señores del pensamiento.
Estamos, pues, ante un exhorto supuestamente a defender la libertad de expresión pero es, en realidad, un llamado a amordazar al mandatario más legítimo que ha tenido México desde hace muchas décadas, expone el texto, el cual menciona algunas organizaciones sociales como tapaderas del saqueo y a órganos autónomos de quejarse por los recortes de dinero que los beneficiaron.
Tomado de Prensa Latina
