Mérida, Yucatán – En un contexto global donde la crisis ambiental se intensifica, emerge una voz que insta a la acción y al amor por la naturaleza en el corazón de México: Fede Quijano. Como Diputada Federal del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), esta líder político no solo representa una postura, sino una convicción que va más allá del discurso.
“La magia de Yucatán me envuelve a cada paso”, compartió la diputada, resaltando la riqueza incomparable de la biodiversidad de la región. No es solo una postura política, sino un llamado personal y profundo para proteger cada especie, cada rincón de este edén mexicano.
Yucatán, conocido por su riqueza cultural y sus cenotes de ensueño, es también un refugio de especies y ecosistemas únicos. Pero esta biodiversidad no es solo un deleite visual o un activo turístico, es un patrimonio invaluable que, según Quijano, requiere de una acción conjunta para su conservación.
La sostenibilidad y el turismo parecen ir de la mano en la visión de Fede Quijano. No se trata de frenar el desarrollo, sino de caminar hacia un futuro donde el turismo no deje huellas, sino recuerdos. “Debemos ser guardianes de esta tierra maravillosa que llamamos hogar», afirmó.
El mensaje es claro y resonante: no es solo tarea de unos pocos, sino responsabilidad de todos. Es una invitación a ver más allá, a valorar y proteger. Fede Quijano finalizó con un llamado emotivo: «Cuidemos juntos de nuestros tesoros naturales, para que las generaciones venideras puedan disfrutar de la misma belleza que nosotros apreciamos hoy».
