Por Juan Pablo Ojeda
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, informó que la Fiscalía General de la República (FGR) investiga el caso del buque incautado en Tamaulipas por huachicol fiscal, pero aclaró que hasta el momento no existe ninguna línea de investigación por tráfico de armas.
Durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, Sheinbaum explicó que la carpeta de investigación se abrió únicamente por contrabando de combustible y falsificación de documentos de aduanas. “La carpeta de investigación no está abierta por el tráfico de armas; la fiscalía en todo caso, de ser así, tendría que informar”, precisó.
La mandataria destacó que la FGR continúa con más indagatorias contra personas, empresas y grupos involucrados, y que nuevas detenciones están por registrarse en los próximos días.
A diferencia del huachicol tradicional, que consiste en el robo físico de combustible de los ductos de PEMEX, el huachicol fiscal opera mediante la manipulación de fracciones arancelarias. Esto permite que gasolina y diésel ingresen al mercado interno como productos exentos del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), generando ganancias elevadas y distorsionando la competencia.
El caso más reciente se dio en el puerto de Tampico, donde un buque fue interceptado tras declarar falsamente el transporte de productos no relacionados con combustibles. La acción derivó en la detención de 14 personas, entre empresarios, marinos activos y retirados, y exfuncionarios de aduanas, todos presuntamente vinculados a esta red de contrabando.
Sheinbaum subrayó que la evolución hacia el huachicol fiscal representa un delito más complejo, que combina fraude fiscal, corrupción y complicidad institucional, y reiteró el compromiso de su administración con una política de cero impunidad, para frenar el daño económico y restablecer la legalidad en la importación de combustibles.
Deja una respuesta