Por Bruno Cortés
La vivienda es uno de esos temas que siempre genera preocupación y, por supuesto, esperanza, especialmente cuando se habla de ayudar a las familias trabajadoras que han soñado toda su vida con tener un hogar propio. Con esa idea en mente, la diputada Maiella Gómez Maldonado, presidenta de la Comisión de Trabajo y Previsión Social, afirmó que la reforma a la Ley del Infonavit será histórica y marcará un antes y un después para muchas familias en México.
Gómez, quien forma parte de Morena, destacó que esta reforma está enfocada en cumplir una demanda histórica del pueblo mexicano: la necesidad de tener acceso a viviendas dignas y a precios accesibles. «Es una reforma muy importante, una reforma histórica que busca cumplirle al pueblo de México en una demanda tan importante como es la vivienda y todo lo que implica para una familia», comentó con entusiasmo.
Durante la discusión de la reforma, que tuvo lugar en las Comisiones Unidas de Vivienda y de Trabajo y Previsión Social, la diputada explicó que, a través de un intenso diálogo con los sectores sindical, empresarial y del Gobierno Federal, se logró construir un proyecto que tiene como prioridad la vivienda social. Esto quiere decir que, además de los aspectos técnicos, se puso un énfasis en las necesidades reales de las familias trabajadoras, las cuales, por años, han enfrentado la barrera de no poder acceder a un crédito por los bajos salarios o por no contar con las condiciones suficientes para calificar.
Uno de los aspectos más importantes que la diputada mencionó es que la reforma mantendrá el carácter «paritario» en los consejos que toman decisiones sobre la distribución de los recursos, lo que significa que los trabajadores, los empresarios y el gobierno tendrán una voz equitativa en la toma de decisiones. Esto busca que el proceso sea más transparente y justo, asegurando que todas las partes estén representadas de manera equilibrada.
Gómez también subrayó que, uno de los mayores avances que traerá la reforma será la posibilidad de auditar el uso de los recursos de la subcuenta de vivienda de los trabajadores. «Los ahorros de las y los trabajadores no se utilizarán para ningún otro fin que no sea el de la construcción de las viviendas», afirmó, dejando claro que no se permitirá que los fondos sean mal administrados o desvíen hacia otros intereses.
Esta reforma no solo se trata de cambiar una ley, sino de cumplir con una promesa hecha por la presidenta Claudia Sheinbaum: la construcción de un millón de viviendas. Para la diputada, este es un derecho constitucional que debe garantizarse, por lo que se crearán todas las herramientas necesarias para hacer que este objetivo sea una realidad.
Gómez no ocultó su emoción al señalar que este nuevo sistema de vivienda, con un enfoque más social, beneficiará a todas esas familias que siempre han tenido el sueño de obtener una casa propia, pero que hasta ahora se les había negado por su situación económica. «Esto es un antes y un después en materia de política pública», concluyó la diputada, refiriéndose a la magnitud del cambio que, según ella, traerá esta reforma.
Así que, si todo marcha bien en el Congreso, esta reforma podría significar un respiro para miles de mexicanos que, finalmente, verán que sus ahorros y esfuerzos no se desperdician, sino que se destinan a la construcción de un futuro mejor para sus familias.
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