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¿Prohibición o regulación? El debate en el Senado sobre los vapeadores y el fentanilo

Por Bruno Cortés

 

 

Recientemente, el Senado de la República aprobó una modificación a la Constitución Mexicana para prohibir el uso de vapeadores y el consumo de fentanilo, lo que ha generado un gran debate en el país. Ricardo Anaya Cortés, senador del Partido Acción Nacional (PAN), se mostró en contra de esta reforma y cuestionó la forma en que se están tomando decisiones tan importantes. Según él, esta medida podría dejar el mercado de estas sustancias en manos de los cárteles de la droga, lo que podría empeorar la situación en lugar de solucionarla.

Anaya reconoció que tanto el fentanilo como los vapeadores son un riesgo para la salud, especialmente entre los jóvenes, pero señaló que la solución no es prohibirlos completamente. Aseguró que la palabra «prohibición» debería ser reemplazada por «regulación», lo que permitiría controlar su venta y uso de una forma más efectiva, sin caer en extremos.

El senador también hizo una dura crítica a la decisión de incluir únicamente al fentanilo en la Constitución, mientras que otras drogas como la cocaína o la heroína no fueron consideradas. «¿Por qué solo el fentanilo?», preguntó. Para él, esto no responde a una lógica de salud pública, sino a una crisis de Estados Unidos que está siendo trasladada a México. «Están utilizando la Constitución para fines que no son claros», agregó.

Con respecto a los vapeadores, Anaya advirtió que la prohibición no va a eliminar el mercado de estos dispositivos, sino que lo va a empujar hacia el crimen organizado. Según él, las grandes tabacaleras y los cárteles de drogas tomarán control de este negocio. «Van a entregar el mercado completo a los cárteles, especialmente al Cártel de Sinaloa y al Cártel Jalisco Nueva Generación», señaló con firmeza.

El senador del PAN también denunció una gran contradicción en la postura de algunos de sus compañeros en el Senado, señalando que muchos de ellos son usuarios habituales de vapeadores. «¿Dónde quedó prohibido prohibir?», cuestionó, subrayando que la medida parece ser una contradicción, ya que muchos senadores de Morena y sus aliados en la Cámara Alta utilizan estos dispositivos.

Además, criticó que el dictamen equiparara el consumo de vapeadores con el uso de fentanilo. Para Anaya, esta comparación es injusta y no tiene sentido. El fentanilo es una sustancia extremadamente peligrosa, con el potencial de causar la muerte con una dosis mínima, mientras que los vapeadores, aunque dañinos, no tienen el mismo nivel de riesgo inmediato.

El dictamen, finalmente aprobado con 110 votos a favor, 5 en contra y 2 abstenciones, modifica los artículos 4 y 5 de la Constitución, con el objetivo de sancionar actividades relacionadas con los vapeadores y el consumo de fentanilo. Esto incluye la producción, distribución, y venta de estos productos y sustancias, así como el uso ilícito del fentanilo y otras drogas sintéticas no autorizadas.

Este debate pone de manifiesto las tensiones que existen en México sobre cómo abordar los problemas relacionados con las drogas. Mientras algunos defienden la prohibición como una forma de proteger la salud pública, otros creen que la regulación y el control son la solución más efectiva para evitar que el mercado se quede en manos del crimen organizado.

 

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