Mientras la reducción de sodio sigue siendo el consejo estándar para combatir la hipertensión, una investigación de la Universidad de Waterloo en Canadá propone un enfoque revolucionario: aumentar el consumo de potasio podría ser incluso más efectivo. Publicado en American Journal of Physiology-Renal Physiology, el estudio utiliza modelos matemáticos para demostrar cómo este mineral ayuda a los riñones a eliminar el exceso de sodio y regular naturalmente la presión arterial.
El sorprendente mecanismo del potasio
Los investigadores emplearon simulaciones computarizadas para analizar cómo interactúan ambos minerales:
- Efecto diurético natural: El potasio estimula la excreción renal de sodio, reduciendo la retención de líquidos.
- Equilibrio evolutivo: «Nuestros ancestros consumían dietas ricas en potasio (frutas/verduras) y bajas en sodio, lo que moldeó nuestra fisiología», explica la Dra. Melissa Stadt, coautora del estudio.
- Diferencias por sexo: Los hombres mostraron mayor susceptibilidad a la hipertensión pero también mejor respuesta al aumento de potasio.
Dato crucial: Una investigación previa en NEJM demostró que usar sal con 25% de potasio redujo un 14% el riesgo de ACV en 5 años.
Alimentos que son armas contra la hipertensión
El estudio recomienda enfocarse en estos campeones del potasio:
✔ Plátanos (422 mg por unidad mediana)
✔ Espinacas cocidas (839 mg por taza)
✔ Brócoli (457 mg por taza)
✔ Naranjas (237 mg por fruta)
✔ Batatas (542 mg por unidad mediana)
«Es tan importante reducir el sodio como aumentar el potasio», destaca el Dr. Marcos Marín, experto en hipertensión del Hospital Italiano de Buenos Aires.
Por qué el enfoque tradicional no basta
La OMS recomienda menos de 6g de sal diarios (2.4g de sodio), pero el estudio revela limitaciones:
- El sodio oculto en procesados (embutidos, sopas instantáneas) dificulta el control.
- Solo el 22% del sodio consumido proviene del salero (78% viene de alimentos industrializados).
- El estrés y factores genéticos pueden anular los beneficios de solo reducir sal.
Solución integrada: Combinar la reducción de sodio con 3,500-4,700 mg diarios de potasio (la ingesta actual promedio es 50% menor).
Recomendaciones prácticas
- Reemplaza snacks salados por frutos secos (almendras: 200 mg de potasio/porción).
- Usa hierbas y especias en lugar de sal para sazonar.
- Incluye 2 porciones diarias de vegetales ricos en potasio.
- Consulta a tu médico antes de suplementar, especialmente si hay problemas renales.
Este enfoque dual -menos sodio, más potasio- podría transformar el manejo de la hipertensión, una condición que afecta al 30% de la población adulta mundial según la OMS. Como concluyen los investigadores: «La naturaleza ya diseñó la solución: volver a una dieta rica en los alimentos que nuestros riñones esperan procesar».