La Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada, ha dado un paso decisivo en la lucha por los derechos reproductivos al expresar su firme apoyo a la iniciativa para despenalizar el aborto, actualmente en proceso de votación en el Congreso local. Este esfuerzo, que ya ha sido aprobado en comisiones, busca eliminar la interrupción del embarazo del Código Penal, planteando que debe ser un asunto regulado en el ámbito de la salud pública.
Brugada enfatizó la necesidad de que las leyes locales estén alineadas con los criterios de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, que ha declarado inconstitucional la penalización del aborto. En sus declaraciones, la mandataria subrayó: «No puede estar la interrupción del embarazo en el Código Penal». Su argumento se centra en la premisa de que el aborto debe ser regulado a través de normas de salud, priorizando la protección y el bienestar de las mujeres.
La propuesta no solo busca despenalizar el aborto, sino también garantizar que las mujeres no sean criminalizadas por decidir sobre su propio cuerpo. La diputada Valentina Batres, quien ha estado profundamente involucrada en la discusión, aclaró que esta reforma no modifica el consenso actual de 12 semanas como límite para interrumpir un embarazo, sino que tiene como objetivo hacer que los servicios de aborto sean más accesibles y seguros.
No obstante, esta iniciativa no ha estado exenta de controversia. Algunos legisladores panistas han expresado su oposición, argumentando que no se han considerado adecuadamente las propuestas de asociaciones pro vida. A pesar de este desafío, Brugada y otros defensores de la iniciativa continúan abogando por su aprobación en el pleno del Congreso, reafirmando su compromiso con los derechos de las mujeres y la salud pública en la Ciudad de México.
El futuro de esta iniciativa representa un cambio significativo en la legislación y el acceso a servicios de salud reproductiva, y será un tema clave en la agenda política local en los próximos días.