CDMX a 31 de marzo, 2024 (Noticias de México).- El Jefe de Gobierno, Martí Batres Guadarrama, destacó la rapidez en el combate de los incendios forestales en la Ciudad de México, resultado del trabajo coordinado entre instituciones como la Secretaría del Medio Ambiente (SEDEMA), la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil (SGIRPC), el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR), la Comisión de Recursos Naturales y Desarrollo Rural (CORENADR) y el Heroico Cuerpo de Bomberos (HCB).
“Quiero destacar la velocidad con la que se han estado extinguiendo los incendios: en el año 2019 el promedio de duración de un incendio durante esta temporada era de cinco horas con 14 minutos, y ahora el promedio de duración es de dos horas con 24 minutos; eso quiere decir que se ha reducido en más de la mitad la duración de los incendios forestales. (…) Esto es un dato muy importante, y nos permite cuidar nuestros bosques, la calidad del aire y nuestros recursos naturales en general”, afirmó.
Explicó que los incendios forestales son más frecuentes en los meses de marzo, abril y mayo, ya que se generan ondas de calor y sistemas de alta presión, que provocan días despejados, altas temperaturas, baja humedad y vientos escasos.
Asimismo, hizo un llamado a la ciudadanía a reportar cualquier conato de incendio forestal al 911, así como evitar acciones que puedan provocar algún incendio.
“Que nos ayude con información de cualquier conato de incendio que se pueda generar y que nos ayude también con información de circunstancias en las que comienza un incendio o, también, evitando el uso de materiales que pueden provocar incendios como, por ejemplo: cristales, lupas, latas o también, evidentemente, evitar totalmente prender fogatas en los bosques durante esta temporada”, exhortó.
La coordinadora general del Servicio Meteorológico Nacional, Alejandra Margarita Méndez Girón, precisó que los sistemas de alta presión, favorecen los cielos despejados, altas temperaturas y viento débil, condiciones para que se presenten los incendios forestales.
“En su mayoría, en el Estado de México y el humo se propague hacia la Ciudad de México, debido a los vientos predominantes que son del sur y del suroeste. Los sistemas de alta presión, son sistemas bastante fuertes que se abarcan a nivel de todo el país y, por ser la parte central de nuestro país, es donde más se concentra la intensidad de estos sistemas y es difícil romper estos sistemas de alta presión. (…) Si se propagan o duran más de una semana, pueden dar lugar a lo que se conoce como las “olas de calor”; y las olas de calor, como comenté, mínimo, pueden durar unos cinco días o 10 días, y estas condiciones favorecen la generación de incendios. Para este año se tienen pronosticadas cinco olas de calor”, señaló.
Se pueden generar, añadió, tres tipos de incendios: superficial, que se propaga de forma horizontal por la superficie del terreno, alcanzan un metro o metro y medio de altura, y se queman pastizales secos, hojas, ramas, arbustos o troncos; subterráneo, que se propagan bajo el suelo y provoca la quema de materia orgánica acumulada y raíces; y el incendio de copa, que es el más destructivo, peligroso y difícil de controlar, ya que el fuego consume toda la vegetación, inicia desde el suelo y se extiende de forma vertical hacia las copas de los árboles.
Indicó que a mediados del mes de mayo está previsto que comience la temporada de lluvias, relevante pues mitiga los incendios.
Por su parte, la secretaria del Medio Ambiente, Marina Robles García, explicó los trabajos que se realizan todo el año para el Manejo Integral de Fuego, con el objetivo de que en la temporada de calor se reduzcan los riesgos que generan los incendios y secundó el exhorto a las y los capitalinos a prevenirles, pues cerca del 100 por ciento son provocados.
“Trabajamos a lo largo del año con una inversión muy importante que ha hecho la ciudad para poder atender los bosques, para poder atender el suelo de conservación de manera que, cuando llegue la temporada se reduzcan los riesgos a que fácilmente se generen estos fenómenos. Pero también implica, en este Manejo Integral del Fuego que, una vez que suceden los incendios, una vez que controlamos los incendios, estas áreas son reforestadas con la mayor velocidad posible en la temporada de lluvias y, en los casos en los que no es necesario, como sucede con los incendios que se dan, por ejemplo, en la zona de pastizales, pues es básicamente un manejo para poder esperar a que las propias semillas germinen solas”, detalló.
En tanto, el director de Preservación, Protección y Restauración de los Recursos Naturales de la CORENADR, Diego Segura Gómez, precisó que 4 mil 500 brigadistas beneficiarios del Programa Altépetl Bienestar y 500 integrantes Comisión de Recursos Naturales y Desarrollo Rural realizan durante los meses de octubre, noviembre y diciembre trabajos de prevención en el 59 por ciento de la superficie de la ciudad que es suelo de conservación.
“Lo que buscamos es el manejo de combustible, lo que queremos es reducir el material combustible, de tal manera que cuando se presente un incendio forestal, éste no adquiera una intensidad que nos dificulte el combate. (…) ¿Qué es lo que hacemos? Hacemos líneas negras, hacemos quemas controladas, hacemos elevación de copa, hacemos mantenimiento de caminos, que nos permite acercarnos de una manera más rápida cuando se presente algún incendio forestal, y hacemos acomodo de material combustible, de tal manera que cuando se presente un incendio, el material esté disperso de manera uniforme en los terrenos forestales y no se origine una llamarada que se nos pueda convertir en un incendio de copa”, compartió.
Y destacó que la Ciudad de México, es la única entidad en todo el país con un protocolo específico en materia de combate de incendios forestales.
“Define con claridad el ámbito de competencia de cada uno de nosotros y, algo que es muy importante, el protocolo define que la brigada que se encuentra más cercana es la que combate el incendio y esto nos ha llevado a tener las estadísticas más bajas. El mismo protocolo establece una zona de interfaz urbano forestal, que es muy característica en la Ciudad de México, y ahí también define el apoyo que tenemos a través del Heroico Cuerpo de Bomberos y de la Secretaría de Gestión Integral y de Riesgo de Protección Civil para poder atender ese tipo de incendios que se nos presentan”, indicó.
El titular de la Promotoría de Desarrollo Forestal de la CONAFOR, Pedro Esteban Díaz Díaz, señaló que la comisión capacita a brigadistas de distintas dependencias de gobiernos estatales, municipales, de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), la Secretaría de Marina (SEMAR) y la Guardia Nacional (GN) para combatirlos, además del Programa de Manejo del Fuego que permite hacerlo de manera organizada, planeada y estructurada.
Asimismo, añadió que este año han capacitado a 2 mil 808 personas para apoyar en la prevención y eliminación de incendios forestales, 114 de las cuales forman parte de las brigadas de la Ciudad de México.
“Tenemos, actualmente, más de 30 mil 864 personas capacitadas de estas instancias, lo que da una fuerza de tarea bastante grande. Nosotros en la CONAFOR tenemos torres de observación, 77; los gobiernos de los estados, 181; tenemos también campamentos que dan atención y albergue a nuestros combatientes, tanto a nivel nacional y aquí en la Ciudad de México; CONAFOR tiene 130 campamentos y los gobiernos locales 127 campamentos. (…) Por esto, es que a nivel nacional hemos disminuido la cantidad de incendios. Actualmente, estamos por debajo de la mitad, con respecto al año pasado, ¿por qué? Porque tenemos una mayor coordinación, mayor planeación y, al menos, una mayor participación de las personas que –les comento– han estado siendo capacitadas. Tenemos, a nivel nacional, distribuidas nuestras brigadas, las brigadas que nosotros capacitamos, brigadas de núcleos agrarios, comunales, ejidales”, recalcó.
Durante su intervención, la secretaria de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil, Myriam Vilma Urzúa Venegas, compartió recomendaciones para prevenir los incendios forestales, como evitar encender fogatas; arrojar pirotecnia, colillas de cigarro o cerillos; evitar arrojar basura, en especial vidrio y plástico que pueden provocar un efecto lupa.
