CDMX a 03 de diciembre de 2020.- En el marco de las videoconferencias dirigidas a profesionales de la salud de primer nivel, hoy se realizó una llamada Abordaje clínico de la obesidad, organizado por la Secretaría de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación (SECTEI), en el que se planteó que la obesidad agrava la situación de los pacientes de COVID 19, y que hay 229 condiciones de salud desfavorables en torno a esta enfermedad.
Estamos en la búsqueda de prevenir que los pacientes con SARS-CoV2 empeoren su salud por las comorbilidades. En esta tarea, la corresponsabilidad del gobierno en todos sus niveles y de la sociedad en su conjunto es fundamental para hacerle frente a la pandemia, estableció la doctora Rosaura Ruiz Gutiérrez, titular de la SECTEI. Debemos entender que obesidad, diabetes e hipertensión, o falta de ejercicio constituyen factores que pueden hacer que empeore la salud en los casos de COVID 19, añadió.
En su mensaje introductorio, el doctor David Kershenobich, director general del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán (INCMNSZ), dijo que la obesidad es considerada una comorbilidad relevante en enfermos de SARS-CoV 2, y precisó que tiene un impacto significativo en la mortalidad. Esta enfermedad es un claro reflejo de una mala nutrición.
“El médico de primer nivel es probablemente quien juega un papel decisivo en su prevención”, advirtió. En su ponencia, el doctor Eduardo García García, del INCMSZ, explicó que la obesidad se asocia con comorbilidades metabólicas, mecánicas y mentales. En torno a las comorbilidades metabólicas dijo que el padecimiento facilita la aparición y desarrollo de prediabetes, diabetes y problemas cardiovasculares.
Las mecánicas se traducen en molestias articulares de rodillas, cadera y columna, y padecimientos como incontinencia urinaria y apnea del sueño. El también especialista en Medicina Interna y Endocrinología y Nutrición, detalló que las comorbilidades mentales en personas obesas se manifiestan, principalmente, en problemas relacionados con la depresión y la ansiedad.
Coordinador de la Química de Obesidad y Trastornos de la Conducta Alimentaria del INCMNSZ, García García reveló que hay evidencia científica sobre la aparición de 229 situaciones de salud desfavorables, relacionadas con la obesidad. El objetivo del médico de primera atención es identificar las particularidades del paciente para sistematizar el conocimiento médico y administrar, de manera correcta, las recomendaciones y propuestas terapéuticas.
Una de las principales causas de este padecimiento radica en que la gente come más y gasta menos calorías. Entre sus consecuencias se encuentra la alteración del tejido adiposo, del páncreas, y cambios radicales en el tubo digestivo. Las hormonas liberadas encargadas de conferir saciedad se encuentran en niveles bajos. El hambre y el deseo de comer están bioquímicamente desproporcionados, especificó.
También aludió al sistema de estadiaje de la obesidad que considera los aspectos metabólicos, físicos, psicopatológicos y limitaciones funcionales. En esta propuesta, conocida como la Escala de Obesidad de Edmonton, se han basado las guías médicas existentes y permite construir un semáforo que va del 0 al 4, que considera diversos aspectos y niveles de afectación.
Además, hizo alusión a un estudio de investigación que planteó la pregunta de qué pasaría a las personas que tienen obesidad, diabetes tipo II con una evolución menor a seis años, y pierden 15 kilogramos de peso en promedio con una dieta de 830 calorías cada 24 horas; con la pérdida de peso, pasan a un nivel de mil 200 calorías por día y caminan 15 mil pasos diarios.
Al respecto, se observó que 46 por ciento de las personas que participaron en el protocolo lograron entrar en remisión de la diabetes, es decir, se normalizó la glucosa, expuso el investigador del INCMNSZ. La Covid 19, abundó, induce un proceso inflamatorio sistémico severo, llamado tormenta de citoquinas, y las personas obesas con estas concentraciones son las que desencadenan las complicaciones múltiples con el contagio.
Antes de la ponencia, la SECTEI y el INCMNSZ firmaron un convenio de colaboración que establece que desarrollarán proyectos de investigación; impulsarán la creación y el trabajo en redes de colaboración de cuerpos académicos; promoverán la cooperación científica y tecnológica; y coeditarán, publicarán y difundirán libros y publicaciones periódicas impresas o digitales, en el campo de la salud.
También, desarrollarán proyectos de innovación educativa; diseñarán y organizarán cursos, conferencias, seminarios, diplomados, programas de formación y actualización e implementarán el curso en línea “Desarrollo de habilidades y conocimientos para el tratamiento de enfermedades metabólicas”, diseñado para médicos de primer contacto y profesionistas de la salud para su entrenamiento en el manejo de las enfermedades metabólicas. para el tratamiento de enfermedades metabólicas”, diseñado para médicos de primer contacto y profesionistas de la salud para su entrenamiento en el manejo de las enfermedades metabólicas.
