CDMX a 11 de agosto de 2022. – La diputada Esther Martínez Romano del Partido del Trabajo impulsará la creación de un marco jurídico que proteja la propiedad intelectual de los bordados mexicanos, ya que por su belleza y originalidad son plagiados por la industria de la moda a nivel internacional.
En el siguiente periodo ordinario que comenzará el próximo 1 de septiembre, la diputada del PT impulsará iniciativas en busca de una nueva legislación que logre frenar la injusta comercialización de los bordados artesanales, ya que rescatar y proteger su originalidad es reconocer el importante papel que tienen las comunidades originarias como custodios del patrimonio cultural y artístico mexicano.
En un comunicado, la diputada informó que esto fue planteado durante su participación en el conversatorio con motivo del Día Internacional de los Pueblos Indígenas, que tuvo lugar en la Cámara de Diputados.
Destacó que las creaciones textiles que elaboran las personas indígenas no solo son muestra de los más elaborados diseños y delicadas técnicas, sino “son bellas expresiones de la historia, cultura y cosmogonía”. No obstante, existen problemas para salvaguardar su identidad, tradiciones, costumbres y sus técnicas de trabajo.
Los bordados hechos por pueblos originarios han servido de inspiración para que trasnacionales de la industria de la moda hagan uso de los diseños y creaciones con un fin meramente económico, sin beneficiar a las comunidades, incurriendo en plagio, robo de iconografía y apropiación cultural, por lo que es necesario crear un marco jurídico que ponga fin a esto.
“Es nuestro deber como legisladores crear leyes adecuadas para proteger la propiedad intelectual y ancestral de nuestros pueblos originarios, a fin de garantizar la obtención de una compensación justa por sus creaciones y el reconocimiento social por la belleza y singularidad de sus elaborados diseños”, aseguró Martínez Romano.
Ante ello, adelantó que el próximo mes presentará una iniciativa para crear el “Día Nacional del Bordado y Tejido”, como un reconocimiento a dicha actividad social y económica.
Asimismo, propuso trabajar en la promoción y reconocimiento de las diferentes técnicas y diseños de bordado existentes en el país, mediante la gestión de su denominación de origen.
“Deseo que estas propuestas prosperen y sirvan para reconocer la historia, cultura e identidad de nuestros pueblos originarios; asimismo, que contribuyan al adelanto y bienestar de las comunidades indígenas”.
