«El fondo de la discusión es la reforma energética de Peña Nieto, que ellos apoyaron e impulsaron, y que estableció un sistema oligárquico para beneficiar a las grandes empresas que el organismo empresarial arropa, violando la ley en figuras como las sociedades de autoabasto que no pagan ni el transporte de energía en las redes de CFE ni los respaldos que la misma proporciona, todo ello con graves daños a las finanzas de la empresa eléctrica nacional», se lee en el comunicado de la comisión dirigida por Manuel Bartlett.
El pasado viernes 5 de noviembre, el Consejo Coordinador Empresarial emitió un comunicado en donde asegura que el sector ha sido blanco de ataques por parte del Gobierno mexicano.
«Denostar a las empresas que invierten en México, y que generan empleos bien remunerados para miles de ciudadanos, es una práctica perversa que hace daño a toda la sociedad. No es justo que el gobierno de México ataque, sin razón, a las empresas del sector privado por haber respetado históricamente la ley», señaló el grupo empresarial.
Ese mismo día, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dijo en su conferencia de prensa diaria que empresas como Oxxo y Bimbo han ejercido prácticas abusivas amparados en su autoabasto de energía.
«Claro que fue tráfico de influencia y les debería dar vergüenza, y deberían de estar arrepentidos y ayudando a que saquemos adelante a la industria eléctrica nacional porque con sus decisiones, pensando de manera individualista, egoísta, sólo con el afán de lucro, estuvieron a punto de quebrar la Comisión Federal de Electricidad», dijo el mandatario.